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En la actualidad es muy común oír “el internet está muy lento”, “el internet está fallando”, “la señal de internet está muy débil” y entre otras, pero ¿a qué se debe todo esto?
Bueno hoy nos toca ilustrarnos al respecto, así en las ciencias de la computación, en forma particular cuando se trata sobre las redes, el ancho de banda digital, ancho de banda de red o simplemente ancho de banda es una medida que corresponde a los datos y recursos de comunicación que se tiene disponible y que viene expresada en bits o múltiplos de él como serían los Kilobits, Megabits y Gigabits; es decir, es la máxima capacidad que tiene nuestra red. Definitivamente es la cantidad de datos que vamos a poder transferir en un periodo de tiempo. Muchas veces es confundido con la velocidad del Internet.
Análogamente podemos mostrar a manera de ejemplo una tubería por donde pasa el agua. La capacidad del tubo; es decir su grosor, permitirá pasar una cantidad de agua. Cuanto mayor sea, permitirá pasar mayor cantidad. Similar a ello se podría aplicar cuando nos referimos al ancho de banda. Mientras mayor sea ésta, más datos podremos transferir en un mismo periodo de tiempo.
Así mismo, esta situación significa que mientras mayor sea el ancho de banda de nuestro internet, tendremos mayor capacidad para realizar conexiones de diferentes dispositivos. Volviendo a la analogía anterior; no es igual tener una tubería muy grande con capacidad de abastecer a varias fuentes, que una tubería muy pequeña para intentar llenar las mismas.
Otro aspecto para analizar es pues la velocidad de Internet; que es muy diferente al ancho de banda, así la velocidad del internet se refiere a la velocidad con la que se transfieren los datos. Es lo que nos ofrece nuestra operadora. Si tenemos contratados 300 Mbps, por ejemplo, y tenemos un cable Ethernet cuya capacidad máxima es de 100 Mbps, no podríamos navegar más allá de ese límite; pues depende del ancho de banda y de la velocidad.
Entonces como podemos observar la velocidad de internet siempre estará limitada por la infraestructura, no se puede navegar más rápido que la velocidad contratada con la operadora. pero tampoco debería ser muy inferior a la velocidad contratada, y ¿cómo saberlo ello? muy sencillo realizando un test de velocidad a nuestro internet; esto mediante aplicaciones que hay en el mismo Internet.
Si tu velocidad de internet está muy por debajo, aquí algunas alternativas que podemos aplicar; reiniciar y reubicar el router, elegir un canal que no esté saturado, comprobar si alguien te está robando tu WiFi, otra opción también podría ser vaciar la memoria caché de DNS de la red, por último, hasta limpiar la carpeta TEMP del sistema podría mejorar la velocidad del internet.
Otra característica importante que demos conocer es que en el mercado hay dos tipos de ancho de banda: simétrico y asimétrico y entre la más recomendada es la banda simétrica; ya que permite el mismo volumen de datos tanto en ida y vuelta. Este tipo de comunicación simétrica actualmente se puede observar cuando se emplea fibra óptica e internet por cable, consiguientemente no debemos confundir ancho de banda con velocidad del internet.