La Tara (Caesalpinia spinosa o caesalpinia tinctoria) es una planta que es originaria del Perú conocida también como la «taya», muy utilizada desde la época prehispánica en la medicina folklórica o popular y en los años recientes, como materia prima en el mercado mundial de hidrocoloides alimenticios; es un árbol pequeño en sus inicios, de dos a tres metros de altura; pero, puede llegar a medir hasta 12 m de altura en su mayor desarrollo.
Según datos estadísticos se dice que el Perú es el mayor productor de tara en el mundo, con el 80% de la producción mundial, cuya producción generalmente se da en los bosques naturales y en parcelas agroforestales, en la producción es seguido por Bolivia, Chile, Ecuador y Colombia.
La tara también es utilizada en la agroforestería, frecuentemente en asociación con cultivos como el maíz, papa, habas, alfalfa, sorgo o pastos. así como en la protección de suelos, especialmente cuando no se dispone de agua de riego, a fin de dar buena protección a muchas tierras que se encuentran en proceso de erosión y con fines comerciales, no ejerce mucha competencia con los cultivos, por su raíz pivotante y profunda y por ser una especie fijadora de nitrógeno; así como tampoco por su copa, que no es muy densa y deja pasar la luz en el lugar que este sembrado en asociación con otros cultivos.
Se dice que como resultado de investigaciones en el Perú se adapta a la alta heterogeneidad de ambientes, desde la Costa hasta la Sierra, especialmente entre 1000 y 2600 msnm (Sagástegui, et al., 1996; Vásquez et al., 2010), donde forma bosques naturales muy antiguos; aunque también puede desarrollarse a alturas de 3000 msnm (Rodríguez et al. 2017) ¹ sobre todo en los valles interandinos.
Del mismo modo, Orihuela (2014) en estudios realizado sobre ciertas características propias del cultivo de tara, utilizo seis caracteres cuantitativos de vaina y semilla y halló que la población de Tara de Ayacucho posee mejores características (que las de Cajamarca y Junín), porque sus frutos son más largos y pesados y las semillas son de mayor diámetro, Portal (2010) en Ayacucho, determinó cinco variedades de «tara»: Almidón común, Almidón gigante, morocho, roja ayacuchana y verde esmeralda; diferenciadas por la longitud de vaina, color de vaina y forma de semilla²
Con respecto a sus bondades curativas y medicinales la tara es muy utilizada en la medicina tradicional para el alivio de malestares de la garganta, sinusitis, infecciones vaginales y micoticas, para el lavado de los ojos inflamados, heridas y para enjuagatorios bucales como el dolor de muelas, dolores estomacales, diarreas, reumatismo y los resfriados
Finalmente, La tara es una planta por excelencia medicinal para curar básicamente a través de gárgaras las infecciones en la garganta, además, si se lava las heridas ayuda a cicatrizar las mismas, porque las vainas de la tara contienen una sustancia llamada tanino, la cual es utilizada para teñir de color negro, las raíces pueden teñir de color azul oscuro, además es utilizada como plaguicida, con la cocción de las vainas secas es efectiva contra piojos e insectos.
Referencia
1) Rodríguez, E. F.; S. Rodríguez; Y. Paredes & V. Rimarachín. 2017. Vegetales tintóreos más utilizados en la región La Libertad, Perú. Arnaldoa 24 (1): 331- 332.
2) Orihuela, C. 2014. Evaluación de la diversidad genética de tres poblaciones de Caesalpinia spinosa procedentes de Cajamarca, Junín y Ayacucho mediante marcadores morfométricos de frutos y marcadores moleculares RAPD. (tesis de pregrado). Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Perú. pp. 45 – 55.