uquispe@unah.edu.pe
En los negocios ambos términos son usados frecuentemente y a veces suelen confundir más que para aclaras las cosas, ante cualquier confusión, es mejor detenerse un momento y preguntarse: ¿Qué significa ser eficaz o eficiente?,
o mejor dar un paso hacia adelante y preguntarse ¿Qué es mejor: ser eficaz o ser eficiente?, analizando por el lado de los negocios, uno de ellos estará altamente ligado a generar ingresos y el otro es importante para lograr el crecimiento.
Entonces, como un líder de una empresa o dueño de un negocio, se tiene que buscar formas que nos permita generar ingresos o utilidades y a la misma vez documentar procesos y sistemas y hacerlos más eficientes.
La historia nos muestra en los diversos acontecimientos esos términos han sido utilizados y para muchos aún todavía es difícil de asimilar y plantear estrategias basados en ser eficientes o eficaces. Algo práctico que permita diferenciarlos, es lograr identificar cuál de ellos permite ver el incremento de ingresos o la generación de ingresos de forma más económica.
Identifiquemos a que se refieren conceptualmente ambos términos, primero ser eficaz hace relación a la capacidad de lograr el efecto que se espera haciendo las cosas correctas para producir los resultados que se desea, en cambio la eficiencia será la capacidad de lograr ese efecto con el mínimo de recursos posibles, en el menor tiempo y de una forma consistente.
El manejo adecuado de los recursos en las organizaciones orientado a alcanzar los resultados con menor costo de alguna medida hace relación a la eficiencia, sin embargo, en este punto habría que evaluar en cuanto tiempo se ha alcanzado y cuan significado habrá sido.
En cambio, si al utilizar los recursos pensando en alcanzar los resultados en el menor tiempo posible sin considerar los costos a que se incurre estaremos practicando la eficacia, sin duda este sería el camino ideal para seguir esta estrategia, sin embargo, hay que cuantificar los costos que se ha generado para llegar al resultado. Las organizaciones a veces no pueden darse el lujo de realizar mayores gastos debido a las múltiples necesidades presentes.
¿Entonces que hacer?, bajo estas circunstancias, se tiene que tener claro que ambos son primordiales y van de la mano, es necesario para ser eficaces, tengamos la capacidad de ser eficientes, es decir se tiene que utilizar mejor los recursos a menores costos posibles practicando la eficiencia para lograr alcanzar la eficacia. En ocasiones la realidad nos exige a ejecutar planes en el menor tiempo y alcanzar resultados que demanda el mercado y esto permite a la dirección establecer estrategias frente a las exigencias cortoplacistas.
A diario las empresas plantean sus estrategias desde la perspectiva de la eficiencia pues una vez que se ha logrado ganar el mercado, crear una marca, tener una clientela suele ser más fácil alcanzar la eficacia. Por otro lado, existirán muchas empresas o negocios que han sido opacados y sacados del mercado por la falta de reacción inmediata que requería ser eficaces. La eficiencia reduce costos, pero es la única defensa en contra del competidor. En cambio, crear constantemente nuevas metas y lograrlos eficazmente, permitirá crecer y entrar en nuevos mercados.