El Pacay (Inga edulis) es una fruta andina ubicada básicamente en América del Sur, es una fruta bastante dulce, muy bajo en calorías y muy delicioso, se le conoce también con los nombres de pacae, guaba, guabo, guamo, inga y pacay del Perú, mayormente se cultiva en países de Sudamérica como Colombia, Perú, Argentina y Bolivia, extendido hacia los países centroamericanos, adaptado a las condiciones de climas tropicales y subtropicales, y generalmente lo podemos encontrar en los límites de algunos caminos y ríos.
Se le considera al pacay como una dulce herencia de los incas, pues existe desde la época incaica, destacándose en sus sabores y gran valor nutricional.
Según bibliografías, se dice que el pacay es originario de la Amazonía, de las zonas tropicales, subtropicales y, en algunos casos, de las zonas templadas de América Latina y el Caribe (Salazar, 2000; Meneses et al. 1996). Según Lawrence (1993), el origen del género Inga se halla en la Amazonía de Brasil, Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia. Las especies también han sido introducidas a través de gran parte de Sudamérica tropical, Panamá y Costa Rica, según León (2000), los frutos son vainas cilíndricas o aplanadas indehiscentes que contienen semillas grandes con arilos blancos, suculentos y azucarados, que constituyen la parte comestible¹
De acuerdo con lo manifestado por Landerman (1973), pacay es el nombre quechua que recibe la fruta de la leguminosa «paterno» Inga edulis, mientras que dos informantes peruanos indicaron que pacay es un vocablo de uso común en la costa sur de Perú para nombrar a una «vaina con fruto». El término está atestiguado en el DRAE como «pacay. (Del quechua páqay) 1. m. Am. Mer. guamo (II árbol mimosáceo). 2. m. Am. Mer. Fruto de este árbol» y, como «pacaya. 1. f. Am. Cen. Variedad de palmera de hojas pinnadas. Las yemas de sus flores son comestibles, al igual que los cogollos y tallos delgados y tiernos. 2. f. Guat. Tarea enojosa». También está atestiguado en el Corpus Diacrónico del español (CORDEO) en un documento fechado en 1595–1615 de Perú, en un contexto donde se enlistan frutos de plantas2
Aquí mencionamos algunos buenos beneficios del pacay: Bajo en calorías porque aporta pocos hidratos de carbono, grasas y proteínas, adecuado para perder peso; Rico en vitaminas, de increíble valor nutricional contiene vitaminas A, B y C. ayudando el sistema inmunológico; Ayuda a reducir los niveles de colesterol, debido a sus propiedades antioxidantes y la fibra que contiene ayuda a controlar y a reducir los niveles altos de colesterol en el cuerpo; Contribuye en el balance de los niveles de azúcar, el pacay es una gran fuente de proteínas y fibras, los que ayudan a mantener adecuados niveles de azúcar en la sangre; Refuerza el sistema inmunológico, gracias a su alto contenido en antioxidantes y vitamina A. contribuye al incremento de la inmunidad del cuerpo previniendo resfriados o enfermedades virales; Previene las enfermedades como el reumatismo, tiene propiedades antiinflamatorias en su corteza, ayudando al mantenimiento de los huesos; Ayuda a prevenir problemas cardiacos, al contener propiedades antioxidantes, previene los daños ocasionados por los radicales libres previniendo ataques cardiacos optimizando la salud del corazón; el pacay es un calmante natural, sobre todo las hojas utilizadas como infusión actúa como calmante de los nervios y alivia dolores de cabeza; Finalmente mejora el sistema digestivo por su alto contenido de fibra mantiene un adecuado funcionamiento del sistema digestivo y puede prevenir el estreñimiento y eliminación de las toxina, como se podrá apreciar el pacay es una joya aun algo oculta entre los frutos que nos regala la región andina, por ello es bueno conocer muchas de sus cualidades y no dudar en consumirlo regularmente.
Referencia bibliográfica
- Lucero Meléndez Guadarrama*, Felipe Trabanino**y Adriana Caballero Roque (2012) Tres perspectivas en torno al uso comestible de las inflorescencias de las palmas pacay(a) y chapay (a) en Chiapas, México: enfoques paleo etnobotánico, nutricional y lingüístico
- Gruszczynska, Anna, (1995) El poder del sonido: el papel de las crónicas españolas en la etnomusicología andina.Cayambe, Ecuador: Biblioteca Abya–Yala