Manual Paz y Miño

En este artículo expondremos las medidas sociales, económicas, salubres, educativas, policiales, militares, etc. dictadas por el gobierno actual, y como están ayudando o afectando a los peruanos.


Origen y propagación

Las pandemias que afectan a mucha gente de una región, un país, un continente y hasta el mundo, se han dado a lo largo de la historia de la humanidad, como la plaga de Atenas por fiebre tifoidea en el siglo v a.e.c., pasando por la peste negra o bubónica en Asia y Europa en el s. xiv, la gripe española a nivel mundial a fines de la segunda década del s. xx, la del SIDA/VIH que ya ha matado hasta hoy a más de 20 millones desde su aparición en 1981, la del síndrome respiratorio agudo severo (SARS) con casi 800 víctimas mortales en gran parte del sudeste asiático en 2002, la de la gripe A, variante del influenzavirus A (subtipo H1N1) surgida en Norteamérica en 2009 con un estimado de entre 150 y 575 mil muertos en todo el mundo hasta 2010, la del ébola en el África subsahariana ente 2014-2016, con más de 11 mil fallecidos (1).

Desde la destrucción del Tawantisuyu con la implantación del llamado Virreinato del Perú, ha habido en esta parte del mundo, epidemias de viruela en el s. xvi, difteria en el xvii, fiebre amarilla en el xix, cólera en el xx (2) que en 1991 mató a casi 3 mil (3).

La pandemia que actualmente sufre todo el globo, aparecida a fines del año pasado, es producida por el rápido contagio del microorganismo llamado covid-19, más conocido por el nombre genérico de coronavirus, que provoca en los infectados síntomas parecidos a los de un resfrío o gripe y que al final ocasiona una rápida neumonía mortal especialmente en la gente de la tercera edad, pero también en jóvenes y niños si están debilitados por el cáncer, un problema cardíaco o respiratorio (4).

Se especula mucho sobre su origen, que fue creado por un laboratorio chino (5) o estadounidense (6) y que de ahí se propagó por accidente o a propósito, o que es una mutación natural transmitida originalmente por algún animal que fue comido como sopa (7), y si el gobierno chino demoró en alertar sobre su existencia y peligrosidad. Hay especulaciones que son más plausibles que otras, pero son las pruebas lo que cuentan.

Ni hablar de las explicaciones religiosas que interpretan las desgracias y desastres naturales, como esta pandemia, como castigos de Dios o parte de un plan divino (8-11), las que hablan de su supuesto origen extraterrestre (12), que la pandemia no existe:  es un pretexto para controlar a la gente (13), o que simplemente es una reacción de la naturaleza contra el daño que le ha ocasionado la humanidad por milenios (14).

Pero todas esas especulaciones, incluyendo las conspiranoicas y paranoicas, para determinar su causa exacta son irrelevantes en estos momentos de altas tasas de infectados y muertos, pues lo que interesa aquí y ahora es detenerlas. Eso no significa que posteriormente no se llegue a saber el origen preciso del virus en cuestión.

La propagación del patógeno es rápida: uno lo adquiere al respirar aire que lo contiene proveniente a su vez de un transmisor humano infectado a través de estornudar, toser o solo hablar (15). Se sabe que la pandemia se originó en la provincia china de Wuhan y de ahí se propagó rápidamente al resto del mundo globalizado (16, 17) sobre todo por medio de los viajes aéreos de los comerciantes internacionales y los turistas. Seguir leyendo

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