La presencialidad es los estudios en las Escuelas de Negocio antes de la pandemia en el mundo, era el más común en los distintos programas académicos, posteriormente se ha ido adaptando a las actividades de aprendizaje en remoto,
tomando en consideración la participación del alumnado y docentes hacia un campus digital multi-conectado.
La educación ha venido cambiando en las últimas décadas, las cuales se han visto obligados a utilizar diversos medios educativos, modalidades de enseñanza no presencial en forma síncrona o asíncrona, en horarios diversos, siendo lo más importante que los estudiantes logren conseguir aprendizajes y competencias inherentes en el desarrollo de sus asignaturas, independientemente de los formatos que se pueden establecer.
Las Universidades y Escuelas de Negocio, prácticamente suponen un modelo de formación y transformación de la experiencia educativa distinta, según la institución, que ha rediseñado sus cursos con nuevas metodologías, contenidos y materiales académicos.
Es evidente, que estos centros de formación académica, se caracterizan por estar un paso adelante y que dentro de esta necesidad está el proceso de digitalización de la enseñanza y cada vez más con mayor prestancia en las distintas ofertas educativas, con la llegada de la pandemia este proceso aceleró en gran medida programas in/on (in class-online).
Gran parte de los programas estuvieron bajo el formato full-time que constituían el 100% de la presencialidad y en la actualidad están utilizando la condición híbrida en un 80%. Esto bajo un formato de educación líquida que pone énfasis a través de los programas de grado, postgrado y executive education. Los alumnos tienen la posibilidad de conectarse on-line de manera simultánea.
Justificar estos cambios en este tipo de escenarios, mencionaría uno de los influyentes pensadores en los últimos tiempos y considerado padre de la educación líquida Zigmunt Bauman que, “todo cambia de un momento a otro, somos conscientes de que somos cambiables y por lo tanto tenemos miedo de fijar nada para siempre”,
acuñaría términos como la educación líquida que definiría el momento actual de la historia, en que las realidades como nuestros predecesores como la educación tradicional se han desvanecido. Hemos pasado a un mundo mas líquido, deseoso de novedades y en constante cambio, donde uno de los mayores generadores de cambio es la tecnología.
El conocimiento se genera a mayor velocidad de la que somos capaces de asimilar y aplicar, lo que ha implicado en el sector educativo, cada vez más competitivo, donde surgen nuevos modelos de negocio basado en las metodologías educativas que utilizan la digitalización como vía para la digitalización.
Bajo estos distintos enfoques, es una realidad, que hoy en día, las Escuelas de Negocio se estén orientándose en el diseño de estrategias educativas que logren alcanzar un nivel de posicionamiento y éxito en sus distintos programas educativos.